domingo, 14 de septiembre de 2014

La Franca Llanes

La Franca Llanes

En Ribadeva urbanización las Matas en la casa la Concha, al lado de la franca nos sorprendió la amabilidad, de ésta familia dominicana y las prestaciones de la casa. Partimos al amanecer y callejeamos hasta la carretera A-634 y bajamos por ella hasta divisar la playa de la franca, sin dejar la carretera y tras unos kilómetros aparece a mano derecha un acceso hacia las vías del tren y al GR (camino de gran recorrido) pasamos aquí rápidamente de la típica carretera sin sentido, a uno de los mejores pasisajes de la península. Se suceden los acantilados y nuestro camino avanza junto a ellos en una expectacular eclosión de belleza y aire de las profundidades del mar. El sendero se extiende varios kilómetros al principio piedra y tierra y mas tarde caminos que entran, se atraviesan varias vallas ya preparadas hasta que pasamos por las cuevas de Covijeru, con las típicas estalactitas y estalacmitas. Tras la visita a las cuevas llegamos pronto al pueblo de Buelna de Magnifica arquitectura de piedra, respetuosa con el entorno. Sorprende el encanto con el que se decoran todas las casas con flores hasta de color azul. Nada mas entrar en Buelna nos encontramos con el albergue Santa Marina donde puedes tomar café y descansar antes de bajar a las playas o continuar el recorrido.  Nosotros continuamos el recorrido por el camino que discurre paralelo a las ensenadas puedes apreciar como las rocas toman formas extraordinarias ya en el mar.  Seguimos por el camino hasta que nos lleva a Pendueles, allí puedes comer algo en un bar restaurante que queda a mano izquierda bajando por una calle en oblicuo, se comía estupendamente y amables.
A continuación sigue el camino por unas antiguas casas indianas abandonadas, de galerías con cristal que muestran el poderío de otras épocas. Seguimos por camino hasta llegar al camping la Paz, que recuerda algunas películas d ciencia ficción donde se habita en  las cimas de las montañas. Seguimos el agradable tramo en ascenso hasta que llegamos a “los bufones”, es una zona turística donde el agua de mar a presión penetra en las intimidades de la tierra creando canales subterráneos que al romper las olas salen a presión al lado del camino, generando un peculiar sonido que una vez más nos demuestra la belleza de la tierra. Tras descansar, un rato continuamos nuestra andadura, por caminos rodeados por eucaliptus, hasta que divisamos el rio Purón desde arriba el cual atravesaremos por un precioso puente de madera. Tras subir un poco llegamos a un desvío que no estaba indicado, es un cruce de caminos casi a 90 grados que se ven las carreteras generales.
Fuimos por carretera alargando bastantes kilómetros la etapa, en vez de llegar a Andrín en unos minutos, con lo cual nos tocó ir por carretera y además meternos en un barrial eterno. Nosotros llegamos a San Roque del Acebal, y allí preguntamos para poder llegar a Andrín, porque no estaba indicado lo más mínimo a demás había perros sueltos muy agresivos. Atravesamos Lanes y llegamos hasta el albergue de llanes al anochecer. Nos recomendaron que no entraramos en el hotel Alonso como peregrinos, con muy buenas razones, por lo que continuamos la marcha hacia el albergue de Llanes.
Una vez llegamos a Andrín,  tuvimos que atravesar Cué y por fin llegamos a Llanes, donde por la hora que era, decidimos pernoctar en El hotel Alonso, tremendo error por el trato recibido. Es un hotel con albergue de peregrinos que no ha sabido integrar el camino de Santiago, tal y como se entiende en éste tipo de circuitos, ayuda mutua, compartir, y un mínimo de empatía con los peregrinos. De hecho encontramos cucarachas, no había mantas, y literalmente nos dijo el dueño que el camino de Santiago le importaba un pimiento. El tema fue que una peregrina  con los pies llenos de ampollas, fue a desayunar con su dinero en la mano, y como no había sacado  ticket el día anterior, no la dejaban, no hablaba el castellano y tenía que irse a otra parte. El bar  más próximo está  un kilómetro más abajo. Por ese motivo y al ser bufet libre la invitamos a desayunar de nuestro bufet libre, por lo que el dueño cuando yo estaba en el baño, increpó a mi pareja diciendo que éramos unos sinvergüenzas y que le debíamos 5 euros por el desayuno. 
 - Lo primero me baja la mano y deja de apuntarme y de gritarme, y lo segundo yo a usted no le debo nada, es bufet libre y puedo tomarme los cafés que quiera como su madre me ha permitido y segundo su establecimiento deja mucho que desear, con cucarachas, sin mantas, por todos los motivos anteriores y sobre todo por las voces que no le permito que me dé.
Cuando salí del servicio, me hizo lo mismo, solo que yo si me gritan grito más, y parece que se cortó conmigo por el espectáculo que él solito estaba montando, con decenas de testigos de un colegio de discapacitados, con sus monitores. Los profes nos dijeron que ya era hora de que alguien le parara los piés a ese señor. No se preocupe que lo compartiremos en las redes sociales, a lo que nos dijo que ya se encargaría el de borrarlo.


4 día Lunes Llanes-Riivadesella
Por la mañana bajamos hasta Llanes, y contemplamos las suntuosas casas señoriales que nos recuerdan ese pasado indiano. Continuamos nuestra andadura en busca de una antigua estación de ferrocarril, que a principios del siglo XX perteneció a las vivencias infantiles de un  familiar muy querido, un cordero y un niño con su mascota lechal.
Atravesamos la estación volviendo a la avenida de la Paz  y unos metros mas adelante encontramos el camino a mano izquierda , creo que no estaba indicado pero es la única forma de ir por caminos hasta Poo el siguiente pueblo. En Llanes las señales brillan por su ausencia. Nos perdimos el puerto de Llanes que al parecer es muy bonito uno  metros hacia el este, muy próximo.
Al coger el camino vuelven las señales, pasamos una rotonda y entramos en el camino de barrio Campliengo y muy próximo está Poo
En Poo nos cautivó el centro de artes plásticas de Poo. Para continuar con un buen desalluno en el bar que hay tras cruzar las vías del ferrocarril. Finaliza el pueblo y a la derecha está el camino de Santiago que busca la ría de Poo pero la va dejando a la derecha. Ascendemos a una serie de acantilados muy transitados por los turistas de la zona y unos kilómetros por el camino con maravillosas vistas de playas, hasta llegar a Celorio. Otra población turística plagada de surfistas.  Dormimos una buena siesta en el mirador de la playa y continuamos hasta la parada de autobús por los comentarios que habíamos encontrado en eroski consumer, “etapa de asfalto sin arcén…”. Este tramo entre Celoriio y Rivadesella quiero investigarlo otro año por caminos de costa, porque según el google maps es casi posible, lo único parece que hay que atravesar a nado algún rio… ¿? Si alguien ha hecho un camino interior puede comentarlo, gracias.
 Llegamos hasta Rivadesella en el bus y como era temporada alta , los hoteles estaban al 100x100 de ocupación. Por lo que anduvimos 4 kilometros más cuesta arriba,  hasta el albergue de San esteban de Leces con nuestra cena comprada en Ribadesella. Para llegar a San Esteba de Leces es necesario atravesar el puente sobre la ria, y acontinuación en la primera curva sale la calle Avelina Cerra que nos llevará a la playa, seguimos el paseo marítimo hasta el final y allí tomamos una pista asfaltada dirección a San Pedro. Pasamos San Pedro y llegamos a un cruce de carreteras, tomamos a la izquierda hasta llegar a San esteban de Leces. El albergue es tradicional con más de 20 años de experiencia.
 El albergue de San Esteban, vuelve a cumplir con los objetivos peregrinos, austeridad, compañerismo peregrino etc. 


Quinto día Sn esteban de Leces - La isla
A las 8 tienes que estar fuera del albergue. Al salir del albergue, bajamos por la parte trasera de la parcela del mismo, por unos prados, el camino nos lleva hasta la bifurcación que tomamos el día anterior. Allí cogemos la de la izquierda. Caminamos por prados agradables con vacas. Pronto llegaremos a Vega, como su nombre indica es una población en descenso hasta la playa. Hay que destacar2 cosas en vega, la decoración de las casas que en algunos casos es extravagante, pero no por ello menos interesante, y la decoración y la alta cocina del bar próximo a la playa justo donde comienza la playa. Tiene una escultura gigante de un pez de color rojo. Merece la pena tomar un café allí.
Proseguimos, el camino rodeando una esplanada con roulots, y ascendemos hasta visualizar las playas desde cierta altura y caminamos paralelos al mar, atravesamos y cerramos varias puertas de fincas con cerrojo. Hasta que el camino va hacia el interior y se encuentra con la N-632 muy próximo a Berbes. Ahí cogemos el camino asfaltado que paralelo a la carretera nos lleva hasta Berbes. Desde Berbes es posible que exista otra opción pero nosotros recorrimos uno incomodos kilómetros por carretera hasta llegar al camino de Santiago que sale a mano derecha y asciende en muy pocos metros a gran altura y pronto se vuelven a ver las playas desde lo alto, continuamos por éste camino viendo playas hasta que tomamos una bifurcación del camino a la derecha y descendemos hasta una playa que tiene una cafetería y aparcamieto. Es pequeña y muy agradable por lo que nos comemos el bocata y siesta. Por la tarde continuamos, siempre paralelos al mar con unas vistas de ensueño, hasta llegar a la paya anterior a la isla, la playa de Calvera, recorremos la playa por la arena hasta que llegamos al final, y para poder llegar a la isla en vez de ir por urbanizaciones, atravesamos las calas que separan las 2 playas hasta que llegamos a la Isla y divisamos el peñón, volvimos a la caretera N632 y llegamos eseguida a la Isla, una pequeña y preciosa población que ha sabido conservar su encanto. El albergue de peregrinos está en el centro del pequeño paseo marítimo. Se puede pernoctar, desayunar y cenar por 20 euros. También tiene servicio de lavandería.

La isla - Gijón
Comenzamos con las maravillosas vistas que podeís apreciar en la imagen adjunta.
El comienzo de la primera etapa, fue cruzando los puentes de San Vicente de a Barquera, pero por la hora a la que llegamos, decidimos comer en el pueblo. Merece la pena tanto para el peregrino como para el turista, porque aunque es una zona esencialmente turística, también hay que saborearla, pero es preferible controlarse con la alimentación porque allí se trata de eso… y nos esperan unos kilómetros.
Cuando salimos de san Vicente y tras contemplar la belleza del entorno con la enorme ría formada por los ríos Escudo y Gandarilla, los barquitos de pesca, y agua por todas partes, comienza nuestra etapa . Dudamos sobre donde estaban las flechas, y al final el mejor sistema  como siempre es “preguntar”, o perder unos segundos en buscar la flecha. Una vez la encuentras(calle camino alto de Santiago), sales de las carreteras generales y asciendes por una pequeña pista asfaltada de chalés que te lleva pronto a unos prados maravillosos con vacas y una gran laguna  en el lado derecho.

Tras un buen rato cruzas la autopista A8, puedes elegir por el camino a Serdio que sale a mano derecha a unos 50 metros, que es más recto, o bién ir por carretera que es un precioso paisaje pero con coches. Si eliges ir por carretera tienes que cruzar la Acebosa y legar al Hortigal para coger a mano derecha una carretera hacia Serdio. Si el albergue está lleno puedes optar por el bar La Gloria, en frente de la iglesia. Alquila habitaciones y cuesta 20 € la doble, dentro de una casa con baño compartido y con posibilidad de lavar en lavadora. También puedes cenar por 9 o 10 euros en su bar. Son muy amables y ponen una música muy agradable.
 Sabado 9
Salimos de Serdio por la mañana temprano, avanzamos por una pista asfaltada y pronto una industria e extracción de piedra queda a nuestra derecha. Antes de terminar la cantera, a la izquierda sale un camino indicado por volardos de piedra con una cruz de Santiago roja. Puedes atravesarlo, pero al legar al final del mismo otro camino que discurre paralelo varios kilómetros, pero al final llega a Muñoredondo, y allí dejas el pueblo en dirección Pesues.
Por nuestra anterior pista asfaltada, llegarémos a una carreterera general, CA181 que seguiremos paralelos al rio Nansa, dejando unos merenderos a la izquierda. Justo enfrente sale una pista que discurre paralela al ferrocarril y pasamos debajo de la autopista. Unos metros delante llegaremos a una preciosa estación e ferrocarril de estilo modernista que deberemos atravesar y cruzar al otro lado para bajar al puente del barrio Pesues estación, CA181 de nuevo, una vez cruzado el rio, Hay una pensión justo en frente por si te flaquean las fuerzas Hostal Venecia, Llamar antes de ir, no he comprobado si funciona.
Al cruzar el rio sale una pista a mano izquierda que asciende bruscamente hacia Pesues, a mano izquierda entramos en una zona boscosa muy agradable que desciende hasta Unquera que es una Zona turística pero sin ambiente peregrino. Hay mucha oferta de deportes de aventura. Es recomendable parar en el primer bar a mano izquierda, “un chino” porque se ha especializado en el camino y tiene de todo… tiene paredes de colores. Dejamos Unquera y atravesamos el rio Deva que separa las provincias de Cantabria y Asturias. Ascenderemos 2 kilómetros por pista de piedra hasta Colómbres con un fuerte desnivel. Casi arriba hay una pequeña virgen a mano derecha. Al llegar a Colombres comprobamos que la arquitectura ha cambiado y comienza a verse las casonas indianas. Nada más llegar a Colombres a mano derecha hay una bonita casa indiana, que es albergue de peregrinos, pero también es hotel de de campamentos infantiles, mejor pasar de largo, por el mal trato a los peregrinos, reza en su puerta, “el turista exige el peregrino agradece”. No obstante mi experiencia personal es que no me dejaron ver las habitaciones, porque a las 2 dela tarde había gente descansando… Al parecer es uno de esos sitios según dicen los comentarios de consumer, llenos de cucarachas y caro para lo peregrino. 
A partir de Asturias existe mucha desinformación en las respuestas de la gente cuando preguntas por el camino de Santiago, no hay tradición y a veces es mejor ir con cautela para no perderse, o atravesar kilómetros de asfalto. Es obligado ver el museo indiano, al que Rosa mi pareja le apodó el inicio de Indianápolis, (circuito de casas indianas através de Asturias).
La historia de la zona está marcada por la tradición indiana, en épocas de florecimiento de la influencia española en las colonias de ultramar, aún siendo países independientes. 
A partir de aquí iremos paralelos a la N-634 por un camino que sale en las calles Alfonso Sánchez y Pio Noriega que pronto se unirá a la misma en un tramo en obras, hasta llegar a la franca. el albergue e la franca bungalows de madera en la playa estaba completo por lo que fuimos al hostal “la Concha” (En Ribadeva urbanización las Matas en la casa la Concha) muy barato para las prestaciones habitación doble con baño incluido en la habitación, vistas extraordinarias, y ambiente peregrino. Y la amabilidad de la familia que lo lleva. Cena por 9 – 10 € y dormir 20€ y lo mejor de todo es el desayuno con un gran zumo de naranja natural incluido. 
3 dia Domingo la franca-Llanes
En Ribadeva urbanización las Matas en la casa la Concha, al lado de la franca nos sorprendió la amabilidad, de ésta familia dominicana y las prestaciones de la casa. Partimos al amanecer y callejeamos hasta la carretera A-634 y bajamos por ella hasta divisar la playa de la franca, sin dejar la carretera y tras unos kilómetros aparece a mano derecha un acceso hacia las vías del tren y al GR (camino de gran recorrido) pasamos aquí rápidamente de la típica carretera sin sentido, a uno de los mejores pasisajes de la península. Se suceden los acantilados y nuestro camino avanza junto a ellos en una expectacular eclosión de belleza y aire de las profundidades del mar. El sendero se extiende varios kilómetros al principio piedra y tierra y mas tarde caminos que entran, se atraviesan varias vallas ya preparadas hasta que pasamos por las cuevas de Covijeru, con las típicas estalactitas y estalacmitas. Tras la visita a las cuevas llegamos pronto al pueblo de Buelna de Magnifica arquitectura de piedra, respetuosa con el entorno. Sorprende el encanto con el que se decoran todas las casas con flores hasta de color azul. Nada mas entrar en Buelna nos encontramos con el albergue Santa Marina donde puedes tomar café y descansar antes de bajar a las playas o continuar el recorrido.  Nosotros continuamos el recorrido por el camino que discurre paralelo a las ensenadas puedes apreciar como las rocas toman formas extraordinarias ya en el mar.  Seguimos por el camino hasta que nos lleva a Pendueles, allí puedes comer algo en un bar restaurante que queda a mano izquierda bajando por una calle en oblicuo, se comía estupendamente y amables.
A continuación sigue el camino por unas antiguas casas indianas abandonadas, de galerías con cristal que muestran el poderío de otras épocas. Seguimos por camino hasta llegar al camping la Paz, que recuerda algunas películas d ciencia ficción donde se habita en  las cimas de las montañas. Seguimos el agradable tramo en ascenso hasta que llegamos a “los bufones”, es una zona turística donde el agua de mar a presión penetra en las intimidades de la tierra creando canales subterráneos que al romper las olas salen a presión al lado del camino, generando un peculiar sonido que una vez más nos demuestra la belleza de la tierra. Tras descansar, un rato continuamos nuestra andadura, por caminos rodeados por eucaliptus, hasta que divisamos el rio Purón desde arriba el cual atravesaremos por un precioso puente de madera. Tras subir un poco llegamos a un desvío que no estaba indicado, es un cruce de caminos casi a 90 grados que se ven las carreteras generales.
Fuimos por carretera alargando bastantes kilómetros la etapa, en vez de llegar a Andrín en unos minutos, con lo cual nos tocó ir por carretera y además meternos en un barrial eterno. Nosotros llegamos a San Roque del Acebal, y allí preguntamos para poder llegar a Andrín, porque no estaba indicado lo más mínimo a demás había perros sueltos muy agresivos. Atravesamos Lanes y llegamos hasta el albergue de llanes al anochecer. Nos recomendaron que no entraramos en el hotel Alonso como peregrinos, con muy buenas razones, por lo que continuamos la marcha hacia el albergue de Llanes.
Una vez llegamos a Andrín,  tuvimos que atravesar Cué y por fin llegamos a Llanes, donde por la hora que era, decidimos pernoctar en El hotel Alonso, tremendo error por el trato recibido. Es un hotel con albergue de peregrinos que no ha sabido integrar el camino de Santiago, tal y como se entiende en éste tipo de circuitos, ayuda mutua, compartir, y un mínimo de empatía con los peregrinos. De hecho encontramos cucarachas, no había mantas, y literalmente nos dijo el dueño que el camino de Santiago le importaba un pimiento. El tema fue que una peregrina  con los pies llenos de ampollas, fue a desayunar con su dinero en la mano, y como no había sacado  ticket el día anterior, no la dejaban, no hablaba el castellano y tenía que irse a otra parte. El bar  más próximo está  un kilómetro más abajo. Por ese motivo y al ser bufet libre la invitamos a desayunar de nuestro bufet libre, por lo que el dueño cuando yo estaba en el baño, increpó a mi pareja diciendo que éramos unos sinvergüenzas y que le debíamos 5 euros por el desayuno. 
 - Lo primero me baja la mano y deja de apuntarme y de gritarme, y lo segundo yo a usted no le debo nada, es bufet libre y puedo tomarme los cafés que quiera como su madre me ha permitido y segundo su establecimiento deja mucho que desear, con cucarachas, sin mantas, por todos los motivos anteriores y sobre todo por las voces que no le permito que me dé.
Cuando salí del servicio, me hizo lo mismo, solo que yo si me gritan grito más, y parece que se cortó conmigo por el espectáculo que él solito estaba montando, con decenas de testigos de un colegio de discapacitados, con sus monitores. Los profes nos dijeron que ya era hora de que alguien le parara los piés a ese señor. No se preocupe que lo compartiremos en las redes sociales, a lo que nos dijo que ya se encargaría el de borrarlo.


4 día Lunes Llanes-Riivadesella
Por la mañana bajamos hasta Llanes, y contemplamos las suntuosas casas señoriales que nos recuerdan ese pasado indiano. Continuamos nuestra andadura en busca de una antigua estación de ferrocarril, que a principios del siglo XX perteneció a las vivencias infantiles de un  familiar muy querido, un cordero y un niño con su mascota lechal.
Atravesamos la estación volviendo a la avenida de la Paz  y unos metros mas adelante encontramos el camino a mano izquierda , creo que no estaba indicado pero es la única forma de ir por caminos hasta Poo el siguiente pueblo. En Llanes las señales brillan por su ausencia. Nos perdimos el puerto de Llanes que al parecer es muy bonito uno  metros hacia el este, muy próximo.
Al coger el camino vuelven las señales, pasamos una rotonda y entramos en el camino de barrio Campliengo y muy próximo está Poo
En Poo nos cautivó el centro de artes plásticas de Poo. Para continuar con un buen desalluno en el bar que hay tras cruzar las vías del ferrocarril. Finaliza el pueblo y a la derecha está el camino de Santiago que busca la ría de Poo pero la va dejando a la derecha. Ascendemos a una serie de acantilados muy transitados por los turistas de la zona y unos kilómetros por el camino con maravillosas vistas de playas, hasta llegar a Celorio. Otra población turística plagada de surfistas.  Dormimos una buena siesta en el mirador de la playa y continuamos hasta la parada de autobús por los comentarios que habíamos encontrado en eroski consumer, “etapa de asfalto sin arcén…”. Este tramo entre Celoriio y Rivadesella quiero investigarlo otro año por caminos de costa, porque según el google maps es casi posible, lo único parece que hay que atravesar a nado algún rio… ¿? Si alguien ha hecho un camino interior puede comentarlo, gracias.
 Llegamos hasta Rivadesella en el bus y como era temporada alta , los hoteles estaban al 100x100 de ocupación. Por lo que anduvimos 4 kilometros más cuesta arriba,  hasta el albergue de San esteban de Leces con nuestra cena comprada en Ribadesella. Para llegar a San Esteba de Leces es necesario atravesar el puente sobre la ria, y acontinuación en la primera curva sale la calle Avelina Cerra que nos llevará a la playa, seguimos el paseo marítimo hasta el final y allí tomamos una pista asfaltada dirección a San Pedro. Pasamos San Pedro y llegamos a un cruce de carreteras, tomamos a la izquierda hasta llegar a San esteban de Leces. El albergue es tradicional con más de 20 años de experiencia.
 El albergue de San Esteban, vuelve a cumplir con los objetivos peregrinos, austeridad, compañerismo peregrino etc. 


Quinto día Sn esteban de Leces - La isla
A las 8 tienes que estar fuera del albergue. Al salir del albergue, bajamos por la parte trasera de la parcela del mismo, por unos prados, el camino nos lleva hasta la bifurcación que tomamos el día anterior. Allí cogemos la de la izquierda. Caminamos por prados agradables con vacas. Pronto llegaremos a Vega, como su nombre indica es una población en descenso hasta la playa. Hay que destacar2 cosas en vega, la decoración de las casas que en algunos casos es extravagante, pero no por ello menos interesante, y la decoración y la alta cocina del bar próximo a la playa justo donde comienza la playa. Tiene una escultura gigante de un pez de color rojo. Merece la pena tomar un café allí.
Proseguimos, el camino rodeando una esplanada con roulots, y ascendemos hasta visualizar las playas desde cierta altura y caminamos paralelos al mar, atravesamos y cerramos varias puertas de fincas con cerrojo. Hasta que el camino va hacia el interior y se encuentra con la N-632 muy próximo a Berbes. Ahí cogemos el camino asfaltado que paralelo a la carretera nos lleva hasta Berbes. Desde Berbes es posible que exista otra opción pero nosotros recorrimos uno incomodos kilómetros por carretera hasta llegar al camino de Santiago que sale a mano derecha y asciende en muy pocos metros a gran altura y pronto se vuelven a ver las playas desde lo alto, continuamos por éste camino viendo playas hasta que tomamos una bifurcación del camino a la derecha y descendemos hasta una playa que tiene una cafetería y aparcamieto. Es pequeña y muy agradable por lo que nos comemos el bocata y siesta. Por la tarde continuamos, siempre paralelos al mar con unas vistas de ensueño, hasta llegar a la paya anterior a la isla, la playa de Calvera, recorremos la playa por la arena hasta que llegamos al final, y para poder llegar a la isla en vez de ir por urbanizaciones, atravesamos las calas que separan las 2 playas hasta que llegamos a la Isla y divisamos el peñón, volvimos a la caretera N632 y llegamos eseguida a la Isla, una pequeña y preciosa población que ha sabido conservar su encanto. El albergue de peregrinos está en el centro del pequeño paseo marítimo. Se puede pernoctar, desayunar y cenar por 20 euros. También tiene servicio de lavandería.

La isla - Gijón
Comenzamos con las maravillosas vistas que podeís apreciar en la imagen adjunta. 

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